Nombre científico del Higuera
El nombre o denominación científica del Higuera es Ficus carica. Los biólogos usan el nombre científico Ficus carica para diferenciarlo en las distintas clasificaciones de la especie naturales escritas en los códigos internacionales única en cualquier lengua.
El nombre científico del Higuera, Ficus carica proviene del latín.
Descripción del Higuera o Ficus carica
La Higuera o Ficus carica es un especie de porte bajo, más semejante al de un arbusto que al de un árbol (entre 3 y 10 metros). Poco exigente en cuanto a las cualidades del terreno, su crecimiento es lento en terrenos secos. No es raro ver retoños o pies bastante desarrollados creciendo en farallones rocosos o viejos muros. Su corteza es lisa y de color grisáceo, mientras que las hojas son caducas, de 12 a 25 centímetros de largo y 10 a 18 de ancho, profundamente lobuladas. Produce frutos compuestos de un tipo especial, el sicono, a los que se conoce como higos.
Usos del Higuera o Ficus carica
Existen restos arqueológicos que confirman que la higuera fue una de las primeras plantas cultivadas por el hombre ya en el 9400 – 9200 a.C. También constituyó una importante fuente de alimento para los romanos y se ha cultivado con profusión desde Portugal hasta Afganistán. En la actualidad además de emplearse como planta ornamental también se explota en agricultura por sus frutos que, en condiciones climáticas óptimás, pueden recolectarse hasta 4 veces al año. Los higos son ricos en fibras, minerales esenciales y manganeso, y pueden consumirse frescos o desecados, o emplearse para elaborar mermeladas.
La utilización del Higuera o Ficus carica es frecuente en Europa y América.
Otros datos de sobre el Higuera o Ficus carica
En la biblia Adán y Eva utilizan hojas de higuera para cubrir su desnudez después de ser sorprendidos comiendo la fruta prohibida. Desde entonces las hojas de este árbol o representaciones de las mismás se han utilizado en pintura y escultura para cubrir los genitales de las figuras desnudas, incluso en obras completas que los coleccionistas o conservadores de arte consideraban obscenas.